La Policía de la CDMX, víctima de la violencia

Luis Ángel García

Una policía inerme, reprimida por las propias autoridades, rebasada y agredida por grupos violentos, vulnera el Estado de Derecho. No es la primera vez en que se pierde el respeto a los uniformados, quienes con estoicismo sufren el embate de anarquistas, ultras, estudiantes, colonos o comerciantes. Desde las estructuras del poder se ha propiciado la desobediencia civil y el sometimiento del principio de autoridad.